Entrada destacada

Perfil del Autor: periodista y escritor Cesáreo Silvestre Peguero

EL DOCUMENTAL COMO MEMORIA Y VOZ Cesáreo Silvestre Peguero es un investigador, periodista y escritor dominicano cuya...

sábado, 9 de abril de 2011

DESIGUALDAD SOCIAL

Por Cesáreo Silvestre Peguero. 
 
Es desigual todo lo que guarde relación con la extrema diferencia entre una cosa y otra, tal como existe entre los desposeídos y los afortunados.
Quienes hayan acumulado dinero en buena lid, en base al trabajo productivo, tienen todo su derecho a disfrutar de sus fortunas; mas no concibo que habiten tan conforme los que tanto tienen, viendo a otros necesitar  de un pedazo de pan o vestuario. Alrededor de 4.500 millones de personas, el 75 por ciento de la población mundial vive en los países en vías de desarrollo y 1.000 millones de ellos subsisten en la  miseria.
Independientemente de los esfuerzos que hagamos para obtener los bienes, debemos saber que las bendiciones provienen de Dios y él le agrada que las comportamos con el necesitado.
Cada cual debe lograr su propio sustento; pero muchas veces los demás requieren de nosotros, como hemos recibido de otros en ciertas ocasiones. El hambre turba, atormenta, desespera emborracha, confunde y crea una indescriptible inquietud. Sé muy bien porque lo digo: la he sentido. 

En la medida en que no dependamos de las avaricias, haremos crecer la quietud que reposa en quienes se satisfacen en ayudar en sus limitaciones aun y, a pesar de ello les alcanza para compartir con los necesitados haciendo honor al mandamiento divino que nos manda amar a nuestro prójimo como a nosotros mismo.
El sol debe salir para todos y más  cuando la necesidad extrema se impone. Los seres solo son humanos si saben justificarlo: si son más humanos. –Si pueden amar. (Ricardo Montanel).
La piedad es la señal más fidedigna de quien posee a Dios en su corazón.
Hacer frente a la extrema pobreza en el mundo en general y en nuestro país en particular, es una labor que hay que desarrollar con clara conciencia de que se trata de un esfuerzo a corto, mediano y largo plazo. La inversión en educación es el mejor instrumento para atacar la desigualdad social y mejorar el acceso a las oportunidades. Y educación para los más pobres, con calidad, llegando hasta la formación técnica y la profesional, incorporando el conocimiento de nuevas tecnologías basadas en el desarrollo de la informática y las comunicaciones modernas; pero no basta con invertir en educación para todos, mientras tanto hay que asistir con programas sociales que transfieran recursos a los más marginados, aquellos que por su edad, minusvalidez física o social sean los más difíciles de incorporar a la vida económica del país a través de la educación y la formación laboral. 
Pero no habrá menos desigualdad, sino se atiende el acceso cada vez más de los pobladores al agua, a la salud, la tierra, la vivienda, y otros servicios básicos. Se necesita mejorar, también, el acceso al crédito (financiamiento para los emprendedores) tanto a nivel profesional y vocacional, como de los  que tienen iniciativas para las pequeñas empresas. 
Esto debe incluir el apoyo financiero de los esfuerzos asociativos, de los bríos solidarios que se traduzcan en empresas económicamente rentables y socialmente útiles.
Por el camino del hambre, no se puede ir ya a la democracia. La democracia no darme sin sabana, no se sienta a comer en el suelo. La democracia, es un lujo de países ricos.
-Prof. Juan Bosch.

EN SU LUGAR


Por Cesáreo Silvestre Peguero.
                                                                                     

Está en su lugar, todo lo que ocupa el espacio físico que por norma le corresponde; en lo material, espiritual, natural o artificial.
En la dinámica cotidiana de cada día, existen dos entes productivos que ocupan sus lugares y ameritan ser considerados en el ejercicio de sus funciones, las que ponen de manifiesto usando la insistencia como instrumento para agenciarse los ingresos económicos que les permiten subsistir. 
-Son ellos los  Moto-conchos y Limpiabotas -Estos productivos ciudadanos rinden un útil servicio  a la sociedad y como tal hay que verlo.
El alcance de su recaudación económica, en medio de tantos que le “tercian”, les hace ofertar sus servicios una y otra vez; de esto sobre viven y, hay que entenderlos.
Es natural que ante sus persistencias nos inquietemos y, más en estos tiempos cruciales, en un país como República Dominicana, (donde se carece del dinero hasta para malamente comer). Moto-conchos y Limpiabotas, tienden a ser constantes al ofertar sus servicios, en el caso de los  Limpiabotas, estos  insisten en Preguntar: “¿Va a limpiar amigo-amiga?”. Mientras que los Moto-conchos persisten en preguntar  ¿Te vas?” 

Peor es que nos mantengamos aburridos ante las humildes preguntas que no cesaran por más mal
geniosos que seamos, Con  las actitudes groseras sólo “amellamos” los ánimos de quienes lucen
dispuestos a insistir y servir.
Debemos ejercitar la paciencia poniendo buena cara; esto así, si nos ponemos en su lugar.

Reconocer a los demás sin exclusión.

Lo objetivo es impersonal, este principio se debe manifestar en nuestra forma de actuar. 
Pueda que alguien no nos haya de simpatizar, pero sus cualidades no la podemos obviar.

Consigamos madurar, en el plano profesional, gerencial socio cultural, familiar y en sentido general.
Reconocer a tientas sin ver el objeto.

 Por Cesáreo Silvestre Peguero.

martes, 5 de abril de 2011

CUANDO LUCHAR TIENE SENTIDO.

Por Cesáreo Silvestre Peguero. 
 

La lucha es el ejercicio constante que tiene como fin alcanzar el logro
en cualquiera de los variados propósitos que cada cual se traza
en la vida. Esas realizaciones son importantes y útiles cuando el fin es de bien para todos. –Como el que tenía la luchadora campesina
Mamá Tingò, que ¡tanto luchó! favor de sus compañeros de jornadas, con quienes libró grandes batallas en procura de que los desposeídos tuviesen derecho a cultivar las tierras.
Reitero, su lucha no fue particular, sino fusionada con las de los demás, en provecho de cuantos le rodeaban.
Con excepción de los oportunistas, terratenientes y opresores en contra de los derechos comunes.
En su piel parecería reposar el negro oscurecer de su parecida
noche: Cuando descansan los trabajadores.
A esa ejemplar mujer le caracterizaba el interés por sus con
ciudadanos. La justicia social era su semejante. Se dejaba invadir del amor al prójimo, esa actitud le concedió la admiración y el respeto de todos los perseverantes.
A pesar de que Florinda Soriano Muñoz (Mamá Tingó) era una dama “iletrada,” tenía condiciones y carácter suficiente para representar la lucha contra los desalojos injustos.
Su limitación educativa se debió al tiempo que le ocupó el cultivo
y siembra de los productos cosechados en el campo.
A la edad de 5 años murió su madre siendo criada ella y sus hermanos
por su abuela Niní Soriano. Aún con edad de niña acompañaba a su abuela, junto a sus hermanos, por las calles de la capital, vendía unas bolsitas llenas de carbón, que ella misma ayudaba a preparar llenándolas y colocándolas en las árganas de los animales. “Cadbón,
cadbón”, voceaba con su voz infantil por “La Capotillo”, ahora
avenida Mella, antes “El Camino de los Burros,” por los barrios de Ciudad Nueva, San Carlos, San Miguel, San Lázaro, “cadbón, cadbón”.
Años más tarde se casó con Felipe Muñoz, con quien decidió tener sus hijos y sostenerlos del trabajo sagrado de sembrar la tierra.
Su esposo Felipe, murió asesinado en un pleito de galleras, dejando en orfandad a sus hijos, el mayor, Domingo Tingó, tenía seis años.
La ausencia de su esposo le hizo esforzarse aún más, teniendo que enfrascarse a trabajar con más insistencia para obtener el sustento de su familia por sí sola. Cosechaba variados productos que vendía,
entre ellos cajuiles, aguacates y bijas. Esa dama trabajadora y de
temple iba a los campos a labrar y cultivar la tierra con su habitual
machete usado como herramienta. Tras el paso de los años y al
quedar viuda, se unió con el agricultor Jesús María de Paula.
Un militar conocido como Pupo Román se había adueñado de forma impropia de las tierras que eran cultivadas por honradas mujeres y
hombres; quienes fueron desalojados arbitraria e imprudentemente, y a quienes les fueron derribadas sus casas construidas con mucho
esfuerzos y escasos recursos.
No fueron alambradas de inmediato las propiedades, pero por él fueron “vendidas” a Virgilio Pérez, quien a esas tierras llevaba sus vacas que comían y atrofiaban los sembradíos de los agricultores
que con entrega las cultivaron, y que luego araron tractores
sembrándolas de piñas.
Quintales de bija, café, cajuiles y otros productos del campo fueron destruidos; pero aún los campesinos permanecían habitando allí, ejerciendo las labores que hacen producir los campos para provecho de todas las grandes ciudades del mundo.
Años más tarde surgió un “nuevo dueño” llamado Pablo Díaz, quien alambró esas tierras, terminó devorando con tractores esos conucos cultivados por largos años.
Pagó a un contingente de policías de los que aterrorizaban al país.
Entre esos oficiales se cita a un tal “Tipo-Tanque y otros”, que apresaban y maltrataban a los agricultores manteniéndolos en una constante zozobra, viéndose obligados a laborar casi a escondidas; permanentemente aquellos hombres y mujeres tenían que rehacer
sus conucos una y otras veces. El indicado acontecer fue protagonizado por la legendaria luchadora y dirigente excepcional Mamá Tingó, quien fue apresada. Sus
verdugos policiales engañaban a los campesinos hablándoles de reformas agrarias, en alianza y complicidad con sectores de laizquierda dominicana; se les ocurrió echarle a ella gratey y
pica-pica produciéndole alergias y picazones, pero se mantenía trabajando con su mocha.
La comunidad la escuchaba y respetaba. Ella entonaba el cántico:
“No me dejen sola, suban la vó/ Que la tierra e mucha y dá pa tó” En esas luchas tenaces Tingó y sus compañeros de luchas fueron golpeados, resultando con roturas de costillas, y numerosos moretones que fueron ocasionados en sus apresamientos y persecuciones.
Deshicieron algunas de sus reuniones en el lugar llamado “la tranquilidad”, que quedaba en la cercanía. 
Dicen que el terrateniente le ofreció “dinero y un apartamento” para que dejara la lucha; pero que ella le contestó que no, que ella prefería que la mataran, porque si no seguían la lucha no iban a conseguir que sus hijos, cuando ella faltara, y la comunidad pudieran trabajar la tierra. Siguió la “Lucha Grande”,
como fue llamada, hasta en los tribunales. Fue asesinada un primero de noviembre después
de regresar del sitio de Monte Plata, en el año 1974 en Gualey, Hato
Viejo, Yamasá, en República Dominicana.
Un individuo llamado Durín, disparó dos escopetazos contra Mama Tingó, quien así murió de
mano de un hombre cobarde que se resistió a tolerar las luchas de esa valiente mujer, que sirvió de ejemplo a seguir y no se dejo mancillar su honor.
En distintos países del mundo siguen siendo ocupadas las tierras
por poderosos…; pero se toman más en cuenta los derechos del
ciudadano gracias a los que han dejado su ejemplo como estandarte.
Mama Tingó era integrante de Liga Agraria Cristiana que componían 350 familias empobrecidas, que luchaban desde décadas. Hoy más que nunca se requiere la unidad para alcanzar las mutuas conquistas que nos corresponde disfrutar a todos
sin exclusión de género color ni estirpe social.
Las luchas reivindicativas protagonizadas por sindicalistas como Mauricio Báez y Mamá Tingó, deben ser causa de motivación por
parte de los dirigentes sindicales de hoy, que se han apartado
de los principios y las luchas, eso así, por el afán de beneficios
particulares que ejercen la mayoría de los partidos Políticos,
algunas iglesias, sindicatos y gremios; en los que sus integrantes
prefieren confabularse con los potentados.
En un país donde el Estado posee los derechos de propiedad sobre
extensas y diversas porciones de tierras distribuidas por toda la
geografía nacional, se ha permitido, desde la muerte de Trujillo en
el 1961, que gran parte de ese patrimonio pase a ser usados por
personeros ligados a los partidos políticos, los organismos armados
y las familias de terratenientes tradicionales.
Las personas que han habitado en muchas comunidades han sido
despojadas de sus derechos (muchas veces no asentados debidamente
en la jurisdicción de tierras), basados en la ocupación y permanencia
durante generaciones.
La Reforma Agraria fue limitada, y no incluyó los amplios predios del Estado con vocación agrícola, los ocupados por la otrora pujante Industria Azucarera y los usurpados por terratenientes en disputas con los pobladores rurales.
No se ha tenido voluntad política para hacer una verdadera transformación
agropecuaria que no solo dé acceso a las tierras a los
verdaderos agricultores, sino que ponga en sus manos los recursos
tecnológicos, financieros y de mercados que hacen eficientes a la
agricultura moderna. Esta es, lamentablemente, otra tarea

pendiente de quienes nos han gobernado.

AL NACER…


Por Cesáreo Silvestre Peguero


La mayoría de los niños lloran al nacer como si presagiaran la penuria que les tocará vivir. Algunos nacen en casuchas o barrancones, otros en ricas mansiones.
Un  grupito tiene al nacer todos los lujos ante ellos, otros carecen de lo básico para subsistir.
Esto es parte del contraste paradójico de la vida.
Aunque haya diferencias de clases sociales, ante la presencia de Dios todos tenemos igual aceptación e importancia.

EL ABORTO COMO EXCUSA

Por Cesáreo Silvestre Peguero

Es la excusa una razón inválida para justificar irresponsables acciones, tal como en la que  incurren muchas mujeres que se quieren librar de asumir el compromiso correspondiente luego de salir embarazadas. Incurren en la interrupción voluntaria del embarazo, que es bloquear o impedir el nacimiento de un niño o niña.
El aborto es la práctica del señalado acto que lo ejecutan quienes carecen de escrúpulos humanos y de sana conciencia. Una criatura comienza a formarse cuando el óvulo fecundado penetra en el útero materno. Durante los primeros tres meses le llaman embrión, y  luego pasa a ser un feto.
Los que por conveniencia propagan esa mala práctica, de forma engañosa han sustituido la expresión crimen de aborto, y en su lugar hablan de interrupción del embarazo”.  En casos de una violación o de incesto, de malformaciones congénitas graves del feto o de una fecundación humana no deseada. Se practican abortos, voluntarios e involuntarios. A veces, ingerido algunas sustancias venenosas para eliminar a la criatura que llevan dentro. Cuando llegan al hospital ya tiene un aborto provocado en curso. Entiendo lógico que algunos embarazos sean interrumpidos por problemas naturales, que se presentan en el proceso de gestación. Otras veces, las embarazadas tienen algún accidente involuntario, esto se pasa por alto.
El aborto voluntario es cuando la madre, premeditadamente, opta por eliminar al niño, ingiriendo remedios caseros o practicándose cierta interrupción medica. 
En relaciones de infidelidad se prefiere no alumbrar al niño. Otras veces se destruye la criatura, porque se conciben fuera del matrimonio o en unión informal, o como producto de una violación, ¿tiene culpa alguna el niño que se forma en el vientre por una causa indeseada? ¿Le asiste responsabilidad a un infante por el hecho de que un degenerado pariente de su madre haya embarazado a esta?
¿Tiene una criatura la culpa de deformación al nacer? ¿Se merece pagar con su vida el niño o niña que se haya concebido mediante un acto de infidelidad? ¿Debe pagar con su muerte la criatura que se concibió en el vientre de una joven que prefiere evadir su responsabilidad, con tal de vivir de apariencia? 
¿Es la pobreza justificación para matar a un niño que se ha empezado a formar? Aquellas damas que están en camino de interrumpir su embarazo por las causas señaladas, deben hacer  un alto y concienciarse al saber que practicarse un aborto es como cometer un crimen cualquiera. Entre los más de 200.000 mil abortos que se practican cada año, en 20 países de América Latina y el Caribe, de estos en 15 países tienen al menos una causa de despenalización del aborto, relacionada con las interrogantes antes citadas.
De acuerdo a datos suministrados a este redactor por  la Secretaría de Salud Pública y el Banco Mundial, en República Dominicana más de 500  mujeres se exponen a morir por causa de las malas condiciones en que interrumpen sus embarazos.
Los informes, dan cuenta de que: cada año se producen más de 200.000 abortos y que el mayor porcentaje es producido voluntariamente. El documento sostiene que las complicaciones por la práctica del aborto constituyen la tercera causa de muerte materna en el país.
La nación dominicana posee uno de los índices de muerte materna más elevados de América Latina y el Caribe,  de acuerdo a las investigaciones hechas por quien suscribe. Más de 200 mujeres mueren tras el alumbramiento. Ese indicador esta por enzima del promedio en el área de 190 muertes de mujeres por cada cien mil niños nacidos.
En países como Canadá y Estados Unidos la tasa de mortalidad es de uno a dos por ciento por cada cien mil nacidos. Cuba, Chile y Costa Rica figuran entre los países de la región que presentan un menor índice en este sentido.
República Dominicana se ubica en el grupo de países con más alto nivel de mortalidad materna, unida a Colombia Venezuela y Haití. Este último, con la mayor mortalidad de madres en América, seguido de Bolivia y Honduras.
Se estima que en el país, el siete por ciento de las adolescentes de 15 años está o ha estado embarazada alguna vez en la mayoría de los casos; sin haber contraído matrimonio.  República Dominicana, la mayoría de los abortos en adolescentes que ingresan en los Hospitales y clínicas (entre el 50 y 80 por ciento) corresponde a abortos provocados.
El 64 por ciento de las Menores embarazadas corresponde a mujeres sin nivel de instrucción y sólo el 11 por ciento de las jóvenes embarazadas corresponde a mujeres que han llegado a completar nivel de educación media. 


Una investigación del Centro de Estudios Sociales y Demográficos estimó que en el país se registran cada año 82 mil abortos, casi la décima parte ocurren en menores.
La población adolescente representa un alto nivel en la población mundial, de cuyo total cerca del 85% vive en países en vías de desarrollo.
La experiencia de las adolescentes en cuanto al aborto merece especial atención, ya que por su condición económica y social han encontrado obstáculos que les han impedido el goce de sus derechos reproductivos.          

El aborto limita la  reproducción humana en las adolescentes,  atrofia su desarrollo sexual y pone en peligro sus vidas cuando recurren al aborto clandestino. Cada año, a nivel mundial, hay por lo menos 4.5 millones de mujeres jóvenes que recurren al aborto inducido, muchas veces realizado en condiciones de riesgo.  
En Latinoamérica y el Caribe, las estimaciones varían entre aproximadamente trece abortos anuales por cada mil mujeres de 15 a 19 años en México, y alrededor de 36 por cada mil adolescentes en República dominicana. Debido a la censura que existe en muchas sociedades con respecto al tema de la sexualidad, los y las adolescentes carecen de información y acceso a servicios adecuados de planificación familiar en condiciones de confidencialidad e independencia.
Las jóvenes adolescentes tienen más probabilidades que las mujeres mayores de tener un parto prematuro, un aborto espontáneo o de que la criatura nazca muerta. También es cuatro veces mayor la probabilidad de que mueran por complicaciones del embarazo.
Los compromisos acordados en la Conferencia Internacional Sobre Población y Desarrollo (CIPD) y la Cuarta Conferencia Mundial Sobre la Mujer reafirman lo establecido en la convención del niño y la niña y declaran que: “toda persona tiene derecho a disfrutar del más alto nivel posible de salud física y mental,” definiendo la salud reproductiva como: “la capacidad de disfrutar de una vida sexual satisfactoria y sin riesgos.”
Los países con asistencia de la comunidad internacional, deberían proteger y promover los derechos de los adolescentes a la educación, la información y la asistencia en materia de la salud reproductiva, estableciendo programas apropiados para responder a ese segmento de la sociedad. Investigaciones de campo indican que el bajo nivel de educación está directamente relacionado con una alta tasa de embarazos entre las adolescentes.
En  República dominicana, Ecuador, México y en la mayoría de los países, más de las dos terceras partes de las mujeres carecen de orientación, por consiguiente dan a luz antes de los 20 años.           
La educación sexual adecuada promueve actitudes responsables y previene embarazos no deseados.     A pesar de que el embarazo no deseado entre las adolescentes constituye un problema prioritario en los países de América Latina y el Caribe no existen programas que atiendan las necesidades de los y las adolescentes en lo referente a información sobre salud o educación sexual orientados a prevenir embarazos no deseados.
Los gobiernos deben desarrollar programas sobre sexualidad, anticoncepción y reproducción que ayuden a los y las adolescentes a desarrollar su capacidad de tomar decisiones responsables. Se requiere asegurar el acceso universal a información y servicios confidenciales y de alta calidad en materia anticonceptiva, así como atención pre y postnatal para adolescentes al margen de su estado civil.
En Latinoamérica y el Caribe, una décima parte de todas las mujeres hospitalizadas por complicaciones relacionadas con un aborto son menores de 20 años.      De acuerdo a las investigaciones realizadas, los únicos países donde el aborto está legalizado son Puerto Rico, Cuba, tres países de Antillas Francesas, Guyana Francesa, Guyana y Barbados.
La práctica del aborto está prohibida en Chile, El Salvador, Honduras, Saint Martín (Antillas Holandesas), “República Dominicana” y en Nicaragua.
La mayor parte de las legislaciones de América Latina han intentado resolver el problema del aborto mediante su prohibición. Es por tanto que se hace necesaria una revisión del tratamiento legislativo que se ha dado al aborto inducido. En la actualidad, la población adolescente1 representa un elevado grado  de la población mundial, de cuyo total cerca del 85% vive en países en vías de desarrollo.
Los efectos del aborto. En la mayoría de los casos a las mujeres no siempre se les dice todo lo que le podía pasar después de abortar. Muchas veces, se explica el aborto como un procedimiento medico común. Pero los aspectos del llamado procedimiento “seguro” pueden dejar un deterioro físico permanente aquellas mujeres que incurren en practicarse aborto, sin medir las consecuencias de tal procedimiento que arrastra problemas psicológicos crónicos según los especialistas en la materia. Las entidades sociales y gubernamentales deben implementar métodos reales de orientaciones para las mujeres que se han practicado aborto alguna vez, muchas desconocen los efectos de esta mala práctica. El asesinato de las inocentes criaturas no debe ser la única alternativa. Efectos físicos: Esterilidad. Abortos espontáneos. Nacimientos de niños muertos. Trastornos menstruales. Hemorragia. Infecciones. Shock. Útero perforado. Coágulos de sangre pasajeros. Fiebre/sudores fríos. Intenso dolor. Pérdida de otros órganos.
Llanto/suspiros. Insomnio, Pérdida de apetito. Pérdida de peso. Agotamiento. Tragar constantemente. Nerviosismo. Disminución de la capacidad de trabajo. Vómitos. Trastornos gastrointestinales. Frigidez. Muerte. Efectos psicológicos: Culpabilidad. Impulsos suicidas. Sensación de pérdida. Insatisfacción. Sentimiento de luto. Pesar y remordimiento. Retraimiento. Pérdida de confianza en la capacidad de tomar decisiones. Pérdida de autoestima. Preocupación por la muerte. Hostilidad. Ira/rabia. Desesperación. Incapacidad de valerse por sí misma. Deseo de recordar la fecha de la muerte. Intenso interés en los bebés. Instintos maternales frustrados. Odio a todos los que tuvieron algo que ver con el aborto. Deseo de acabar la relación con su pareja. Pérdida de interés en el sexo. Incapacidad de perdonarse a sí misma. Sentimiento de deshumanización. Pesadillas. Ataques /temblores. Frustración. 
Las malas prácticas dejan sus consecuencias. Existen muchas damas que han abortado voluntariamente y cuando desean conservar una criatura pagan las consecuencias de sus anteriores errores, ya que no consiguen conservar vivos a sus posteriores criaturas. Esto se puede evitar. En Latinoamérica y el Caribe, las estimaciones varían entre aproximadamente trece abortos anuales por cada mil mujeres de 15 a 19 años en México, y alrededor de 36 por cada mil adolescentes en República Dominicana.

En este país, el debate en torno a “penalización de aborto”, lo pongo en dudas que esté bien conceptualizado porque en este país hay prohibición y criminalización del aborto provocado, pero no creo que se penalice le aborto. No conozco que en nuestra sociedad se esté procesando penalmente a quienes practican la interrupción del embarazo, ni los médicos, ni al personal de salud. 

Es cierto que el código penal vigente tipifica como crimen y establece condena para los implicados en eso, pero la realidad es que hay una tolerancia social a la práctica de este mal del aborto.
No hay un ministerio público que investigue casos, ni persecución por parte del ministerio de salud, ni investigación ni acción disciplinaria del colegio médico, ni denuncias de casos que ayuden a corregir este mal. 
La realidad es, que se producen decenas de miles de estos abortos años tras años y no hay procesos judiciales abiertos donde se persiga por las muertes de las criaturas.
Solo cuando muere una mujer, los familiares que creen que ha sido por negligencia y malas prácticas, producen denuncias y acusaciones; nunca por la muerte de la criatura. Así qué, hablar de que en este país se penaliza el aborto, no es más que eufemismo legal.