Felipe de Jesús: La voz que forjó admiración.

Felipe de Jesús: La voz que forjó admiración.

Por Cesáreo Silvestre Peguero

​Felipe de Jesús Zorrilla Ramos es una voz que forjó admiración.

Como locutor, su estilo sobrio, su voz serena y su trato sencillo le han ganado el respeto y la cercanía de su audiencia. Su dedicación, su voz comercial de alto nivel y su manera auténtica de comunicar lo han convertido en una figura icónica de la radio dominicana.

​Nacido el 5 de febrero de 1960 en Sibawete, El Seibo, la vida de Felipe de Jesús cambió a los 10 años cuando se mudó con su familia al Ingenio Consuelo. Allí, bajo la sombra de un tamarindo, nació su amor por la radio. Junto a su amigo Domingo González, creó una emisora imaginaria llamada “Radio Tamarindo”. Este juego, que continuó

incluso cuando su amigo se fue, fue el inicio de un destino ya trazado. Con un vaso y una cuchara como micrófono, imitaba los noticiarios de la época, practicando sin saberlo para el futuro.

​Trayectoria profesional

​Su inquebrantable pasión lo llevó a ser administrador del antiguo Cine Consuelo, donde grababa la publicidad de las películas. Fue en 1981, cuando el director de Radio Oriente, Jhosep Bernabel, escuchó su voz y, a pesar de que le dijeron que no era locutor, lo buscó de inmediato. Así, Felipe inició su carrera formalmente, compartiendo micrófono con Francis

Aníbal.

​Su talento lo llevó después a Radio Rutas en La Romana, Radio Rey en Hato Mayor, y a Radio Mar en San Pedro de Macorís. También trabajó en Radio Dial, bajo la dirección de Pipí Bello, Omar Cepeda y el artista Marcos Caminero, donde su voz dio vida a espacios como "Lo Mejor de una Estrella" y "Teléfono Musical". Su popularidad fue tal que incluso tuvo clubes de fans, convirtiéndose en un referente de la radio moderna.

​A lo largo de su carrera, se ha consolidado como una voz versátil. Junto a Fredy Miller y Agustín Santana, transmitía las carteleras de boxeo, y en el béisbol de invierno participaba en el programa "Dentro y Fuera del Estadio". Desde 1994, su voz es sinónimo del programa “El Círculo de Espera”. También forma parte de la Cadena Verde de las Estrellas Orientales junto a reconocidas voces como Radamés González, Leonidas Henríquez, Héctor Luis Morla, Carlos José Lugo y Tano Martino.

​Además de su trabajo en la radio, Felipe de Jesús ha sido una voz comercial destacada en la transmisión de baloncesto profesional, tanto en radio como en televisión, con los Cocolos de San Pedro de Macorís. También trabajó en transmisiones de béisbol de Grandes Ligas para la emisora 670 AM, junto a Leonidas Martínez, Tano Martino y Carlos José Lugo.

​Educación y vida personal

​Felipe de Jesús inició sus estudios primarios en la escuela Paso Cibao en Magarín, El Seibo, y los concluyó en la escuela Fabio Sánchez Ruiz en el Ingenio Consuelo. Sus estudios secundarios los realizó en el liceo nocturno Manuel de Jesús Peña y Reinoso.

​Su formación profesional incluyó estudios de Locución en el Instituto Nuevos Horizontes y varios cursos técnicos, como Electrónica de radio y televisor en la escuela laboral de San Pedro y el Instituto ITI de Santo Domingo, donde también se especializó en fabricación y reparación de inversores. Cursó un posgrado en el Instituto Phildata y también realizó un curso de Periodismo Radiofónico.

​Detrás del micrófono, late el hombre de familia. En 1985 conoció a Juana Fiordaliza Vásquez, con quien se casó en 1988 y tuvo tres hijos: Jediliza, Aderlyn y Felipe de Jesús Zorrilla Vásquez. También es padre de Leidy de Jesús Zorrilla Pérez. Es el séptimo de nueve hermanos y el más pequeño de su padre.

​Felipe de Jesús se convirtió al cristianismo en 1995 junto a su familia en la Iglesia Faro de Luz. Desde 2013, se congrega en la Iglesia Monte Carmelo, donde sirve como músico, tocando el piano y el bajo.

​La trayectoria de Felipe de Jesús nos recuerda que los sueños pueden nacer bajo la sombra de un tamarindo y hacerse realidad con perseverancia, disciplina y un amor inquebrantable por la comunicación. Su vida es un testimonio de sencillez, autenticidad y vocación, digno de permanecer en la memoria colectiva de la radio dominicana.